Uno de los bares típicos de Ayamonte, en un sitio céntrico y la verdad que muy agradable para pasar el rato. La comida bastante buena y las cantidades también. El servicio es bueno y calidad-precio muy buena. Para repetir!!

En nuestra visita a Ayamonte dimos con este bar para cenar. Nos acomodamos en una mesa para 4, el camarero vino enseguida, nos tomaron nota y nos explicaron las especialidades que les quedaban (habían estado en ferias). Pedimos tomates aliñados, boquerones, acedías y solomillo al roquefort. La comida llegó bastante pronto, no esperamos mucho. Cómo aspectos negativos, es que nos sentamos fuera casi al lado de la puerta y con el foco que tienen empezamos a estar rodeados de mosquitos, lo cual se hace incómodo. Y otro aspecto negativo es que el camarero se planta allí a tomar nota cuando aún no lo tienes claro... no hay que atosigar a los clientes, dejen tiempo y que sean ellos los que llamen cuando lo tengan claro. Además estaba todo el resto pasando por la mesa a ver si se llevaba tal o cual cosa, de hecho teníamos una bebida a medias en el botellín... viene y sin decir nada se la termina de echar al comensal en el vaso para llevarse el botellín... alucinante. ¿Sabe realmente si la persona quería echárselo en ese momento, cree que de haberlo querido echar no lo hubiera hecho él mismo? Por lo demás, laco.ida bien.